.
La verdad, cuando me hablaron de ti Diana, y me dijeron que curabas malestares sin el uso de medicinas, de entrada yo no lo creí; de hecho, pasó mucho tiempo hasta que me decidí a probar.
Un día, desesperada de despertar todos los días con dolores de cabeza, le llamé a la persona que me había recomendado que fuera contigo y me decidí a verte. Con la primera sesión me bastó para saber que tu terapia era algo diferente e increíble; desde que salí del consultorio la primera vez, ya me sentía bien. Yo sufría de dolores de cabeza y migrañas desde los 9 años, hoy tengo 51 y es una maravilla no padecerlos y no tomar ningún tipo de analgésico.
Por otro lado, mi situación emocional a mediados de 2017 fue muy difícil, tuve que superar varios duelos, tantos como entre el 2007 y 2009, en aquel entonces me llevo años superarlos, pero gracias a esta terapia, esta vez salí mucho más rápido, en cuestión de semanas. He dejado de tomar medicamentos y mi salud y mi estado de ánimo están increíbles.
.
Me veo hace dos años. El dolor de estómago, de cabeza, las noches de insomnio, la ansiedad ante la decisión de salir de una relación agresiva. Conforme le contaba mi situación a Diana, ella me iba aclarando lo que me sucedía. Me dio referencias a estudios y teorías para ver el ciclo de abuso en el que estaba metida, también usó otros métodos alternativos y visualizaciones para que tomara una mayor conciencia de lo que vivía.
Diana, me ha acompañado con sus conocimientos sobre la psicología, la neurología y la espiritualidad humana. Pero sobre todo, me ha acompañado con cariño, humor y fe. Ha rescatado mis partes creativas y luminosas. Desde el inicio, puso énfasis en que yo tenía los recursos para estar bien y eso me dio mucha confianza. La he buscado atormentada por la ansiedad, el abandono, la indecisión, los celos, la inseguridad y en cada ocasión me ha devuelto a la parte equilibrada y armoniosa de mí misma.